junio 13, 2008

La criada de la Sra. Blaha : Rainer María Rilke

No encuentro otro modo de comenzar este post que no sea aludiendo a la repetida y trillada frase de que la infancia nos marca para siempre. Particularmente las tragedias de la infancia, sin embargo estoy convencida que existe un mecanismo casi mágico que logra que estos terrores de la primera época se vayan transformando en arte. Las infancias tormentosas suelen, con cierta frecuencia, ser el inicio de muchos artistas.

La librería Ecdótica, gracias a Bartolomé Leal, ha elegido para junio el cuento: La criada de la Sra. Blaha. Una muchacha, una situación inicial tan familiar que podría haber ocurrido en cualquier lugar de Bolivia, solo algunos datos como los nombres de los personajes y lugares no dan otra ubicación.

La protagonista es una muchacha cualquiera, pero escondidas en su pinta de chica de pueblo hay tinieblas de las que ella misma es inocente. Un lenguaje simple, con frases que parecen dispersas, obligan a esforzarse en la búsqueda de relación entre ellas. Poco a poco la historia nos va dejando una sensación extraña que cierra con un escalofrío.

Mas o menos sucede lo mismo con la lectura de la biografía de Rainer Maria Rilke, su infancia marcada por la hermana muerta que le precedió, el duelo irresuelto de su madre que le vistió de niña hasta lo cinco años, la incursión forzada en la escuela militar, las mujeres que lo amaron e influenciaron, y un largo etcétera que lleva enfermedad, guerra, amistades y la escritura de su propio epitafio.

El asomo por la vida de seres presas de sus propios demonios, seres extraños y oscuros, resulta una experiencia fascinante, una mezcla de placer y horror. Ana, en el cuento de Rilke, es como el Sr. Wonka, el hombre manos de tijera de Tim Burton, los personajes de Guadalupe Nettel en El Huésped, los extraños seres suicidas de Vila Matas, las escritoras Alfonsina de Roberto Cáceres, almas perdidas, marcadas, pero finalmente vivas, con algo que contar.

1 comentario:

Joseph dijo...

aunque no he leído la criada, pero si rilke , me parese muy bonito cómo lo describes . perosnalmente me identifico con este poeta . saludos